Cuando las venas se nos marcan, se estanca la sangre y aparecen las varices se debe a que las válvulas de las venas están débiles o lesionadas. Esto hace que se expandan y pierdan la capacidad de contraerse y dilatarse, por tanto, la sangre se estanque y acumule más de lo normal. Así la sangre no circula con normalidad, se acumula y se crean las varices.
Es cierto que la gran mayoría de pacientes con varices son mujeres pero cada vez son más los hombres que las padecen. Además, cabe decir que no es un factor únicamente estético, sino que también afecta a la salud.
Seguramente te estés preguntando las causas que provocan estas varices, pues resulta que hace unos años, en 2011, GAIT, Genetic Analysis of Idiopathic Thrombophilia, estableció la base genética de la Insuficiencia Venosa.
¿Qué quiere decir esto? Pues que el estudio demostró que el factor hereditario tiene importancia en el 97% de los casos.
Por otro lado, en una entrevista que realizó la Asociación Cuida Tus Venas al Doctor José Manuel Soria, de la Unidad de Genómica de Enfermedades Complejas del Institut de Recerca de Sant Pau, afirma que “lo que conocemos actualmente de estas enfermedades no nos permite curarlas, sino que podemos incidir en su progresión”.
Por ello podemos echar mano a medicamentos venotónicos con hidrosmina como principio activo, por ejemplo Venosmil. Este aumenta el tono de las venas y la resistencia de los capilares que transportan la sangre. Por tanto puede aliviar los síntomas de la insuficiencia venosa y tratar de que el retorno venoso no empeore.
